Campanario del Convento de las Clarisas de Lorca (Francisco Bonilla, 2011)

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¿Es sismorresistente la edificación en España?

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01.03.2021

Aunque España no está expuesta a grandes cataclismos, la edificación sismorresistente no debería parecernos algo exótico o ajeno a nuestra realidad.

Cuando nos enfrentamos al diseño de cualquier edificación sismorresistente, es imprescindible comprender la “teoría de las placas tectónicas” y, por lo tanto, de la causa de los terremotos.

El encuentro entre dos placas litosféricas se produce en la denominada zona de subducción, donde se hunde una placa bajo la otra. En los límites de las placas se forman cordilleras y depresiones orogénicas o fosas marinas.

Entre las diferentes zonas de subducción, destaca por su actividad el conocido como “cinturón de fuego”, que agrupa los límites de las placas tectónicas de Filipinas, del Pacífico, Norteamericana, de Nazca y Australiana, circuncidando el océano Pacífico.

Placas tectónicas (U.S. Geological Survey)
Situación de las placas tectónicas (U.S. Geological Survey)

En el entorno de la península Ibérica se encuentran la placa Africana y la Euroasiática, siguiendo la costa argelina, el mar de Alborán, norte de Marruecos y adentrándose en el océano Atlántico. A pesar de que la zona de subducción existente entre ambas placas (con acercamiento de 4,5 mm/año) no está entre las que registra una mayor actividad sísmica, este es un fenómeno que no resulta del todo ajeno (Salcedo & Campesino, 2012).

El sureste peninsular (provincias de Málaga, Granada, Almería, Murcia y Alicante) es la zona más afectada por actividades sísmicas. Esto se debe a la colisión entre placas a lo largo del eje atlántico-mediterráneo, liberando energía a través de fallas activas cuaternarias (Bonelli & Chacón, 1961). Algunas de estas fallas son la de Alhama de Murcia, de la Vega Media del Segura y la de Crevillente, en Alicante.

Peligrosidad Sísmica en España (Ministerio de Fomento, 2012)
Mapa de peligrosidad Sísmica en España (Ministerio de Fomento, 2012)

Sismicidad histórica en el entorno peninsular

El conocido como terremoto de Lisboa se produjo el 1 de noviembre de 1755 a unos 300 km al suroeste del cabo San Vicente, en el océano Atlántico. Se estima que tuvo una magnitud de 8º a 9º en la escala Richter. El epicentro subacuático generó un tsunami con olas de hasta 15 metros de altura que causó importantes daños en las costas atlánticas de la península Ibérica y del norte de África (Martínez, 2017). Solo en la capital lisboeta dejó varios miles muertos y numeroso daño material, motivo por el cual se le conoce por su nombre.

Lo cierto es que, debido a la zona en la que nos encontramos, no es descartable que se repita un fenómeno sísmico con características similares al macrosismo de Lisboa. Eventos similares se produjeron con anterioridad al seísmo de 1755, al menos, en los años 395, 881, 949 y 1531 (Campos, 1991). La siguiente tabla refleja los principales terremotos ocurridos en los últimos siglos:

FechaE. RitcherEpicentro
25/08/18046,4º (est.)Dalías, Almería
21/03/18296,6º (est.)Torrevieja, Alicante
25/12/18847,0º (est.)Arenas del Rey, Granada
20/04/19565,0ºAlbolote, Granada
28/02/19697,8ºCabo San Vicente (PT)
11/05/20115,1ºLorca, Murcia
Elaboración propia. Datos del Instituto Geográfico Nacional

La experiencia del terremoto de Lorca de 2011

El terremoto de Lorca del 11 de mayo de 2011 es el acontecimiento sísmico con un mayor poder destructor de las últimas décadas en territorio español. El epicentro se situó a 2 kilómetros al noroeste de la ciudad murciana. Pese a que su magnitud no fue demasiado elevada (5,1º en la escala Richter), sus efectos fueron devastadores por la cercanía del hipocentro con la superficie terrestre (2-3 km de profundidad). La aceleración sísmica fue de 0,37 g horizontal, lo que triplica la aceleración básica (0,12 g) indicada para la zona en la Norma Sismorresistente vigente. El temblor principal vino acompañado de 131 réplicas que dejaron una balance de 9 muertos, 293 heridos y numerosos daños materiales (Salcedo & Campesino, 2012).

La comparativa con el terremoto de Albolote de 1956 resulta esclarecedora. Los dos seísmos fueron de una magnitud idéntica, 5,1º en la escala Ritcher, con epicentro cercano a un núcleo de población y a escasa profundidad.

El terremoto de Albolote protagonista del No-Do Nº695-B, 30/04/1956 (RTVE)

La principal diferencia entre ambos es la forma de construcción predominante. En el caso granadino predominaban las edificaciones tradicionales de una y dos plantas de altura, construidas en base a muros de fábrica de mampostería de piedra y tapial, mezcladas con ladrillo. En cambio, en el terremoto de 2011 se puso a prueba un universo edificatorio muy distinto al existente en la España de mediados del siglo XX. Los sistemas estructurales porticados de hormigón armado pudieron testarse en una situación de prueba para una edificación sismorresistente.

Estructuras históricas de fábrica

El patrimonio arquitectónico, concentrado en el Centro Histórico de la ciudad, fue de los más afectado por el terremoto de 2011, produciéndose desperfectos en 33 edificios históricos (VV.AA., 2011). No es el único caso en la cuenca mediterránea, una de las áreas con mayor concentración de bienes de interés cultural. El Instituto para la Conservación de Monumentos y Sitios Históricos (ICOMOS) organismo perteneciente a la UNESCO se muestra preocupado por la peligrosidad sísmica que presenta esta zona de alto valor histórico.

Estos bienes inmuebles, al estar formados por pequeñas piezas de mampostería, no tienen un comportamiento monolítico ni tampoco se muestran flexibles frente a los movimientos sísmicos. Son especialmente vulnerables los puntos más rígidos de sus fábricas, como las esquinas y los estribos (VV.AA., 2011).

Campanario del Convento de las Clarisas de Lorca (Francisco Bonilla, 2011)
Campanario del Convento de las Clarisas tras el terremoto de Lorca (Francisco Bonilla, 2011)

El caso de la iglesia de Santiago (siglo XVIII) que sufrió el derrumbe de la cúpula, crucero y coro, se reconoce como el más icónico de la catástrofe. Las torres de varias iglesias, así como sus elementos de remate:

  • Pináculos
  • Cornisas
  • Molduras
Iglesia de Santiago en Lorca (Ministerio de Cultura, 2017)
Iglesia de Santiago en Lorca. Crucero colapsado y restauración (Ministerio de Cultura, 2017)

Sistemas estructurales de hormigón armado

Los daños producidos en los edificios con estructuras porticadas de hormigón armado fueron puntuales (VV.AA., 2011). Estos se produjeron como consecuencia de una deficiente ejecución y/o distanciamiento respecto a lo indicado en la normativa EHE-08. El comportamiento global de este tipo de estructuras fue bueno, superando de manera generalizada un seísmo de acción triple a la prevista por la norma NCSE-02 para una edificación sismorresistente.

No obstante, sí que hubo que lamentar el colapso total de dos edificios de este tipo. Los principales fallos detectados fueron:

  • Inexistencia de pilares cortos, que emergen desde el sótano.
  • Falta de juntas estructurales
  • Uso de acero poco dúctil
  • Déficit de cercos en el armado de las cabezas de los pilares
  • Anclaje deficiente de las armaduras en el hormigón
Edificio colapsado en Lorca (Universidad Politécnica de Madrid)
Uno de los 2 edificios colapsados en Lorca (Universidad Politécnica de Madrid, 2019)

Elementos secundarios de albañilería

La mayor parte de los desperfectos no se produjeron en los sistemas estructurales si no en las diferentes fábricas de ladrillo.

  • Cerramientos en fachada
  • Tabiques
  • Antepechos

En cambio, las soluciones prefabricadas en seco, como los tabiques modulares de placas de yeso laminada, aguantaron mucho mejor que los tradicionales de ladrillo. Otros elementos constructivos de carácter secundario también presentaron grandes daños:

  • Balcones
  • Terrazas
  • Petos

En ese sentido es reseñable que las fachadas ventiladas se comportaron especialmente mal, en muchas ocasiones por el incorrecto apoyo en el borde las estructuras. La experiencia nos indica que se debe apostar por sistemas de cerramiento capaces de absorber las deformaciones, como por ejemplo cerramientos con estructuras de madera o metálicas.

Cascotes de cerramientos de fábrica (La Vanguardia, 2011)
Cascotes de cerramientos de fábrica en las calles de Lorca (La Vanguardia, 2011)

El futuro de la edificación sismorresistente

En términos generales es fundamental concienciar a la población residente en los territorios con una considerable peligrosidad sísmica. La educación social frente a eventuales acontecimientos sísmicos debe comenzar desde una edad temprana, integrándose en los planes de estudio. Como ha demostrado la experiencia en otros países, la prevención es clave para minimizar daños ante futuras actividades sísmicas.

En algunos países existen organismos nacionales dedicados a la planificación de las respuestas frente a catástrofes naturales. Por ejemplo, la Oficina Nacional de Emergencia del Ministerio del Interior y Seguridad Pública de Chile realiza campañas de sensibilización, elabora planos de evacuación o coordina simulacros urbanos de alerta por tsunami.

Señal de vía de evacuación en caso tsunami en Antofagasta, Chile (David García Díez, 2012)
Señal de vía de evacuación en caso tsunami en Antofagasta, Chile (David García Díez, 2012)

Por último, se prevé que la actual Normativa de Construcción Sismoterrestre (NCSE-02), vigente desde 2002, sea sustituida por el más exhaustivo Eurocódigo 8. Esta se trata una norma de ámbito continental redactada por el Comité Europeo de Normalización (CEN) que pretende unificar los criterios de los distintos países.

Bibliografía

  • Bonelli, J. & Chacón, L. (1961). Estudio de la sismicidad en la zona murcianoalicantina, en Instituto Geográfico Cat.
  • Campos Romero, M.L. (1991). Los riesgos naturales y su incidencia en la Península. El riesgo sísmico y de tsunamis en el suroeste español, en XII Congreso Nacional de Geografía. Sociedad y Territorio. Asociación de Geógrafos Españoles y Universitàt de València, Valencia, España. 139-145.
  • Martínez Solares, J.M. (2017) El Terremoto de Lisboa de 1 de noviembre de 1755, Físicas de la Tierra (29), Ediciones Complutense. Madrid, España. 47-60.
  • Salcedo Hernández, J.C., & Campesino Fernández, A.J. (2012). Experiencias constructivas del terremoto de Lorca. Investigaciones Geográficas (57), 7-37.
  • VV.AA. (2011). Informe del sismo de Lorca del 11 de mayo de 2011. Madrid, España.
David García Díez

Arquitecto por la Universidad de Valladolid y Máster en Conservación y Restauración del Patrimonio Arquitectónico por la Universidad Politécnica de Madrid. Ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional en Chile, trabajando tanto en empresas privadas como para las Administraciones Públicas. Formó parte del equipo redactor del PGOU de la ciudad de Puerto Montt. En el ámbito académico, fue profesor de la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Los Lagos. Desde 2019 es responsable de Prescripción y Obra Nueva de VELUX para la Com. Valenciana y Murcia.